jueves, 8 de septiembre de 2016

498-Dios, eres mi paz

La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo.
→No se angustien ni se acobarden. 
Juan 14:27 (NVI)

→Dios ha prometido la paz porque esta es una necesidad básica en la vida.

Hay una palabra hebrea para la paz
⇨“Shalom”, y uno de los nombres de Dios es “Jehová Shalom”, que significa "Yo soy el Dios de la paz".

La verdadera paz viene de Dios. Jesús es para nosotros la fuente de paz, aquella que es interior y que hace que nuestra mente no se angustie.

APLICACIÓN PERSONAL:
→La paz es un anhelo del corazón de la mayoría de los seres humanos, pero realmente muy pocas personas en este mundo están en “paz consigo mismos”. Hay una carga de ansiedad, estrés y tensión en sus vidas. Existen algunos elementos que roban la paz, entre ellos están:

▷Lo inexplicable:
Es fácil perder nuestra paz cuando lo que ocurre no lo podemos entender, es claro que en la vida no todo es justo, ni todo sale bien siempre. No tener una explicación para lo que pasa hace que se pierda la paz.

▷Lo incontrolable:
Muchas cosas están fuera de nuestro control. Cosas pequeñas como un “trancón” en la vía, una persona que no llega a tiempo. Otras como la ansiedad por logros no obtenidos, etc.,. Cuando estas cosas - grandes o pequeñas – suceden, nos frustramos y perdemos la paz.

▷Las reacciones:
Ante los acontecimientos se reacciona diferente, muchos no se saben controlar y pierden su “buen genio”, y aunque saben que tienen estos ataques de ira y desesperación se resisten a cambiar y se molestan cuando alguien más intenta hacerlos razonar y  trata de cambiarlos. Tanto el que reacciona mal como el que los trata de cambiar pierden la paz. 

→El antídoto para todos estos males es aceptar el regalo de la paz que Dios nos está ofreciendo, no es algo que tengas que hacer. Ni algo que mereces.

No se puede lograr por nosotros mismos. Tampoco tiene que ver con llevar una vida sin problemas.

Es un regalo de Dios que debes aceptar.

El enemigo siempre está al asecho buscando como robarte esa paz y sin darte cuenta, te descuidas en la oración,,,,donde debes renovar tu espíritu en cada día....y ahí te caes....

El argumento ese de que:
→"Somos seres humanos tenemos  altas y bajas..Así que no nos engañemos ni queramos aparentar lo que no es."

Esto no es lo que enseña la palabra de Dios, Esto ni siquiera está en los planes de Dios.... Por que Dios no nos creo para que fuéramos personas infelices.

Dios NO nos hizo así....eso son mentiras del diablo....Dios nos creo para que tengamos vida y paz en abundancia....

Jeremías  29:11
📖→Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

Por que Cristo no murió en la cruz para servirte de afirmación positiva para levantarte el animo, mas bien,,,,,lo hizo para brindarnos un remedio reconciliando nuestra relación con el padre... Porque ya estábamos muertos en el pecado.

¿Por qué murió Jesús en la cruz del calvario? 

Juan 3:16 nos dice:  →“Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna”.

⇨MURIÓ POR AMOR....

Así que....Dime ¿que paz puede ofrecer el mundo?

Pues:
Podemos ver en el  pasaje biblico (Mateo 19:16-30) del joven rico que nos deja, quizá, cierta congoja. Debido a sus riquezas, el joven fue incapaz de responder a la llamada de Jesús y “se marchó triste”.

Si el mundo es incapaz de procurarme alegrías que perduren,

¿por qué reniego una y otra vez de esa invitación del Señor a seguirle definitivamente?

En el mundo no cabe Dios, por eso sólo me provee de mentiras, falsas ilusiones, ambiciones e intereses y, al final, tristeza. Somos capaces de grandes resoluciones y propósitos encomiables, pero llegado el tiempo de la perseverancia, el corazón se agota y no encuentra la fuente adecuada donde calmar su sed. ¿El motivo? Constantemente caemos en el espejismo de que es aquí, en la idolatría de lo temporal, donde puedo alcanzar la felicidad. Ese deseo de reconocimiento, ese celular que “lo hace todo”, ese vestido con el que “siempre” causaré admiración a todos, el carro “definitivo”, el bolígrafo que “nunca” agotará su tinta, la computadora que “jamás” habrá de ser reparada, el “pelotazo” económico con el que cubriré el resto de mis años…

En cada uno de esos sueños siempre hay un halo de eternidad, porque el corazón del hombre está llamado a ser dichoso ¡siempre!....
Sin embargo, detrás de lo ilusorio que hay en lo caduco existe un profundo e inconsciente deseo de que con mi sólo esfuerzo, o, con esa suerte que siempre me acompaña, todo girará, algún día, alrededor de mi, y seré, por fin, “eternamente” feliz.

¿Es eso la felicidad?

Observa, de verdad, al joven rico, a quien Jesús había mirado con cariño porque desde niño había cumplido los mandamientos. Le faltó lo fundamental: pasar del cumplimiento de las normas a la amistad íntima con Dios sin condiciones.

Sólo en esa entrega encontrarás la auténtica alegría, porque dejarás de ser esclavo de lo finito y vivirás en la libertad de quien lo tiene todo: el corazón de Cristo, vencedor del mundo, que me entrega la dicha de la eternidad por amor.

Amén

Así que recibe esta palabra y atala a tu corazón. Y RECIBE LA PAZ EN EL NOMBRE JESÚS.......

Amen
Dios te bendiga en su infinito amor...

💒PRO/PR2016©📡📲
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(Jueves ,8 de Septiembre de 2016)
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